Acróstico (A María Antonia Uribe)
A tiéndeme, mujer, no es un reproche,
M as bien es un consejo que deseo
A lcances en tu mente a conservar:
R eflexiona en lo mucho que has sufrido
I ncapaz de saber que todo ha sido,
A caso por soberbia y vanidad.
A sí cual la paloma que amorosa
N o modula otro canto que el arrullo,
T ú debes ser sumisa y cariñosa
O poniendo el candor al torpe orgullo,
N o pretendas altiva y desdeñosa
I mponer como leyes tus caprichos
A l hombre bueno que se llame tuyo.
U nidos por cariño marcharían
R egando de perfumes toda senda:
I magina el hogar que formarían
B ajo un cielo sin nubes de tormenta
E namorada tú, él satisfecho.
San José, Agosto de 1906
0 Comments:
Post a Comment
<< Home